- Más información;
- Más integridad;
- Menos impunidad, y
- Menos indiferencia.
Principalmente tenemos que preguntarnos críticamente si la información que obtenemos es suficiente o debemos buscar más, si la misma es íntegra o en contraposición es parcial, si la sociedad toma los delitos de forma indiferente o no y si es sancionada la gente que comete actos delictivos.
Para recuperar la confianza en las instituciones y terminar con la corrupción: la fórmula de las 4 i— Delia Ferreira (@DeliaFerreira) 26 de enero de 2018
Más Información
Más Integridad
Menos Impunidad
Menos Indiferencia#WEF18 @anticorruption pic.twitter.com/cvHld1sgBK
Estos pilares fundamentales son muy importantes, ya que incluso pueden ser políticas internas de empresas u otras organizaciones.
Está más que claro que deben considerarse las adecuaciones al caso concreto y una implementación propicia (por ejemplo una transparencia extrema puede llevar a una afectación a, por ejemplo secretos estratégicos o que beneficien a la competencia).
De cualquier forma, gracias a políticas de datos abiertos, y otros programas similares, está cada vez más claro que la transparencia y la capacidad de que la ciudadanía pueda auditar y controlar la información generada (evitando el oscurantismo), beneficia a todos.